Sobre el papel de las fuentes “confiables” de la agresión mediática
Alberto Maldonado S Rebelión Hace pocas semanas, la prensa continental (en diversos espacios y tonos) difundió una información proveniente del Departamento de Estado de Estados Unidos, según la cual varios países del mundo, entre ellos Cuba, han sido nuevamente encasillados entre los promotores de terrorismo, en el mundo. ¿La fuente de información? Desde luego, el susodicho Departamento de Estado que, desde hace años, se ha arrogado una suerte de juez supremo mundial no solo en asuntos de terrorismo sino en asuntos económicos, de riesgo, de libertad y de democracia. Para ello usa sus organismos oficiales, a los que les da el timbre de impolutos; sobre el bien y el mal. No hace falta decir que los propios Estados Unidos y sus más fieles aliados (como Colombia, México, Chile) jamás aparecen en tales listas a pesar de que hay evidencias más que contundentes que dicen exactamente lo contrario. Recordemos: En materia de terrorismo, hace décadas que no se ha “filtrado” algún síntoma de q