lunes, abril 18

El cuento de la crisálida.

Os voy a contar un cuento.
Quizás el de cenicienta, o quizás no. No, nadie tenía que salvar al la protagonista, ella sola sabía salvarse.

Quizás Pulgarcito, por que la prota era pequeña, por que era la pequeña, por que se sentía pequeña.

Quizás, un cuento de vida cotidiana, de protagonista cotidiana.

Os voy a contar un cuento, mi cuento...

Erase una vez una niña que no sabía jugar con muñecas, solo las vestía y las desvestía, y las vestía con harapos.
Erase, que se era una niña, que no sabía crear juegos con un ser plástico.
Y cuando lo hacía siempre repetía la misma recreación.

Su princesa, no era tal, era una chica pobre, mal vestida y mal peinada a la que nadie prestaba atención.
Siempre escondida bajo 3 mantos hechos jirones.

Todo el mundo vivía su vida perfecta, con sus ropas y maquillajes perfectos, ¿quien repararía en aquella chica ¿mugrienta?

Un día en un empleo la contrataron y comenzó a despuntar sobre el resto, en esfuerzo, en creatividad, en valía.

Algunos,  por miedo empezaron a mirarla de soslayo.

Una noche de fiesta de empresa por primera vez fue invitada.

Aquella noche a sabiendas de que había podido demostrar tanto, solo entonces se quitó aquellas ropas raídas, que cambió por un aspecto impecable.

Al presentarse en la fiesta, todos se sorprendieron ante la aparición de tanta belleza.

¿Quien era aquella chica?   

Todo el mundo se quería acercar a ella.

Ella, les miró de soslayo, como antes le hicieron, siguió su camino, y prefirió no mezclarse con aquella gente que con anterioridad si quiera sabía de su existencia.

Y así jugaba la niña, una y otra vez, una y otra vez.....







miércoles, abril 13

¡¡¡He vuelto al cine a ver pelis de mayores!!!!!

¿ A que tu tambien quieres ir al cine a ver el último estreno? 
Genial, vamos, pero... recuerda la peli es para mayores; genial yo soy mayor.
Si, si tu eres mayor, pero... ¿ y tus peques? ¿ Que haces con ellos? ¿ Se los dejas a los abuelos.... otra vez? ¿ Te quedas en casa,  te resignas y te esperas a que cumplan los 18 para poder volver alguna vez al cine?
Pues estas preguntas ya quedan obsoletas, por que los Cines Lys han puesto solución creando una fantástica idea que será del agrado de padres e hijos.
Se trata de la zona Mini Lys, un espacio donde ellos pueden jugar, divertirsey  hacer amigos nuevos mientras tu te secas las lágrimas de emoción al atravesar el umbral de la puerta que te llevará a ver ¡¡¡UNA PELI DE ADULTOS!!!

Foto de Oroneta Fotografía.

Lo hemos podido comprobar de primera mano, ya que Cines Lys tuvo la amabilidad de invitar a un buen racimo de bloggers valencianas a vivir la experiencia.
La película elegida fue 100 Años de perdón. Un thriller de robos, atracos, tramas políticas y mucha, mucha acción de Daniel Calparsoro, ambientada en Valencia.

Sobra decir que salimos encantados, al igual que nuestros peques que lo pasaron en grande en la zona Mini Lys. 



Para reservar en la zona Mini Lys tendréis que hacerlo a través de internet o en las taquillas del cine.

Y en cuanto a los requisitos, aquí os los dejo de un modo visual.





Mirad la zona por un agujerito:


Animaos, sin duda, vale la pena. Nosotros repetiremos.



viernes, abril 1

El bote de molar.

Mis hijos tienen una perfecta relación amor/odio en la cual trabajan todos los días de su vida, sobre todo en la parte odio.

Más que odio es una competitividad que como hombres llevan intrínseca en su genero, pero que llevan un poquito más allá, queriendo estar siempre uno por encima del otro.

Una lucha continua por ser el mejor, que a mi me enerva y me enferma.

Siempre pienso el modo en que yo podría darles herramientas para que aprendan que competir no es bueno, que el trabajo en equipo es mucho más importante.

Se me ocurrió reciclar mi bote del aburrimiento en un nuevo bote llamado: El bote de molar.




Lo que intento con él es reducir los conflictos de una manera diferente.

La fórmula es la siguiente:

1. Cada miembro de la familia será un color, Papá es el azul, Grommy es el rojo Pequete es el verde y yo soy el amarillo.




2. Cada miembro de la familia escribirá algo bueno de cualquier otro miembro de la familia ( o de todos los demás, a elección): Molas porque....., me gustas por que... hoy me he divertido contigo por que..., eres....




3. Cada miembro de la familia doblará el papel en dos y lo introducirá en el bote de molar.




4. Los domingos abriremos el bote y cada uno leerá los papelitos de su color, en los que el resto de la familia le habrá escrito por que mola.

Que pretendo obtener:

1.Transmitir emociones positivas.

2. Que tengan conciencia de los momentos buenos.

3. Reforzarles la autoestima.

4. Fomentar un buen clima de convivencia.

5. Estrechar vínculos.

No se como funcionará, pero en el simulacro de prueba que hemos hecho hoy, ha habido de todo.
Ellos no han sido capaces aún de escribirse algo positivo, sin meter alguna palabra que fastidie al otro. Seguiremos trabajándolo para ver como evoluciona el tema.

Eso si los míos si que han molado.




Y cuando Pequete ha leído el mío, me a pedido otro más, en el que yo he escrito:

ME gustas cuando callas porque estás como ausente,
y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca.
Parece que los ojos se te hubieran volado
y parece que un beso te cerrara la boca.(Neruda)


Y éste ha sido el resultado:




A ver ahora, quien me lo despega para poderme ir a hacer la cena.

Ya os iré contando como se va desarrollando del invento.

See you later. Babbupi's Mumm.