El viaje fue genial, pero tengo que decir que he vuelto con una extraña sensación. Me explico, tengo la idea de que Venecia esta obsesionada con los gatos, no se por qué, paseara por donde paseara, siempre veía algún gato, y no me refiero a un gato de carne y hueso, vivo y maullando, que va!
Todo empezó nada más llegar, en la primera tiendecica de máscaras a la que nos acercamos a mirar, allí estaban... máscaras de gatos, grandes y pequeñas, de plastico o ceramica, decoradas o blancas... pero alli estaban!! Al principio era curioso, incluso gracioso, ya que una de las chicas con las que fui es una gran fan de los gatos, tiene una gran colección de cosas de gatos, amén de dos gatos preciosos. Pero cuando en cualquier esquina te vas encontrando cosas de gatos... te comienzas a mosquear... camisetas con gatos vestidos de gondoleros, llaveros con gatos, bolsos con gatos, figuritas de murano de gatos (incluso familias completas de gatos!!),... sin dejar de lado, por supuesto, la numerosísimas máscaras que se podían ver en cualquier comercio.
Al principio lo ves como una cosa curiosa, pero te acabas preguntando qué le pasa a esa ciudad con los gatos. Porque lo que esta claro es que esto no puede ser casualidad, conclusión a la que llegas cuando ves una tienda completamente dedicada a ellos!! Todo lo que puedas imaginar decorado con el felino: camisetas, bolsos, vajilla, productos de papelería, lámparas,... incluso azulejos!!
Así que lo primero que hice nada más llegar fue ponerme a buscar una explicación, la cual creo que obtuve en parte, pues no he quedado del todo satisfecha, aun asi... aqui os dejo el enlace, si alguien tiene una explicación mejor... ya sabe!
Por cierto, he de decir que en todo el viaje no vi ni un solo gato vivo, una noche oí maullar a uno, pero en cuanto intenté seguir el sonido, desapareció...